Fernanda Rivera Wolf estudió Derecho en la Universidad del Desarrollo en la ciudad de Concepción, y actualmente es Alumni UDD. Obtuvo una beca de la Universidad de Salamanca para continuar sus estudios de Postgrado de Doctorado en Derecho y, además, ya cuenta con un magíster en Derecho Privado Patrimonial de la misma institución.
Fernanda se sintió emocionada por la oportunidad de estudiar en España, y según lo que nos contó, lo escogió debido al idioma y la posibilidad de vivir sola en un nuevo país y el prestigio a nivel internacional de la Universidad de Salamanca. Durante su máster en Salamanca, se enfrentó a la pandemia, lo que dificultó su experiencia, pero se adaptó y continuó sus estudios y terminando con honores su postgrado.
Su tesis de máster se centró en la cláusula “rebus sic stantibus”, una cuestión relevante en el derecho contractual y que actualmente ha sido bastante discutido y estudiado por la doctrina nacional e internacional. Posterior a su maestría y por su excelente desempeño académico, postuló a una beca para el Doctorado en Derecho de la Universidad de Salamanca, que obtuvo por sus excelentes notas.
Tras obtener una beca para el doctorado, Fernanda se embarcó en una investigación sobre el incumplimiento por imposibilidad de sobrevenida de la prestación. Pretende ordenar y delimitar esta institución, separándola adecuadamente de otras como el caso fortuito.
Durante la entrevista, Fernanda nos compartió su experiencia en el extranjero, sus años estudiando derecho en concepción y sus desafíos académicos en España, junto a las proyecciones en su vida profesional.
Elegí la Universidad del Desarrollo para estudiar Derecho debido a su prestigio académico y la calidad de su programa en el área del Derecho. Además, me atrajo su enfoque en la formación integral de los estudiantes y las oportunidades de desarrollo profesional que ofrece.
Fue una experiencia enriquecedora y desafiante porque pude desarrollarme académicamente y también como persona. La universidad me brindó una formación sólida en Derecho, con profesores dedicados y exigentes que me ayudaron a adquirir los conocimientos y habilidades necesarios para mi futuro profesional.
No estuvo exenta de momentos frustrantes y estresantes, por diferentes motivos, pero a pesar de las dificultades, siempre mantuve la motivación para seguir adelante y alcanzar mis metas académicas.
En palabras simples, lo pasé muy bien, tuve la oportunidad de participar en actividades extracurriculares, formar grupos estudiantiles y hasta ser parte del centro de alumnos.
Fue como un año después de haber dado mi examen de grado. Yo todavía no juraba, por lo que no podía llevar juicios, ni nada similar. Así que, comencé a preparar estudiantes para rendir el grado, llegué a tener cerca de 17 alumnos. En ese momento, me di cuenta de que me gustaba enseñar y el tema de la academia. Así que me sirvió también para juntar plata y poder venirme a Salamanca a estudiar.
Decidí estudiar en España y en la universidad de Salamanca porque es reconocida internacionalmente por su excelencia académica y, además, su enfoque en el área del derecho me atrajo mucho. Sumado, a que es la cuarta universidad más antigua del mundo. Con respecto a mi experiencia, puedo decir que fue muy enriquecedora y emocionante.
El magíster fue en Derecho Privado Patrimonial y en mi tesis investigué sobre la cláusula rebus sic stantibus, la cual pretende un restablecimiento del equilibrio de las prestaciones contractuales, cuando las mismas se alteran de manera excesiva por un evento sobrevenido, es decir posterior a la celebración del contrato, imprevisible y externo a la voluntad de las partes.
Luego del máster, siempre estuvo en mi mente. Sin embargo, decidí regresar a chile, pues estábamos en pandemia y en ese entonces nadie sabía a qué nos enfrentábamos.
Estuve cerca de dos años en Concepción donde trabajé como abogada del Servicio de Registro Civil e Identificación Nacional. Luego, me enteré de la convocatoria de la beca interna de la universidad de Salamanca para alumnos extranjeros y postule, adjudicándomela el mes de julio de 2022. Sin lugar a dudas es una excelente oportunidad académica, profesional y personal.
Recibir la beca para el Postgrado de Doctorado en Derecho fue un gran logro personal.
Estoy investigando el incumplimiento por imposibilidad sobrevenida de la prestación, un poco siguiendo la línea de investigación de mi magíster. Básicamente y a muy grandes rasgos, estamos frente a esta institución cuando la prestación no se puede cumplir por una imposibilidad legal o física, objetiva, absoluta, definitiva y no imputable al deudor.
Mi enfoque está en analizar cómo las legislaciones de diferentes países abordan este tema. Además de definir los límites de la imposibilidad sobrevenida con otras instituciones del derecho que han sido entrelazadas a esta de manera incorrecta confundiendo al jurista y conduciendo a una aplicación errónea del derecho.
Después de terminar mi doctorado, me gustaría trabajar en el área de la academia en Chile. Quiero compartir mis conocimientos y experiencias con futuros estudiantes de derecho, y contribuir al desarrollo del sistema legal en mi país. Para mí lo esencial es dar a conocer un poco mi historia y quizás motivas a otros a atreverse, pues yo fui una alumna del montón que con perseverancia, entusiasmo y responsabilidad está haciendo lo que le gusta, logrando objetivos de apoco.
Creo que mi sello Derecho UDD es la disciplina, perseverancia y el trabajo bien hecho. Siempre me esforcé por hacer las cosas con excelencia y entregar un trabajo académico pulcro. Además, mi perseverancia y constancia en el estudio han sido fundamentales para mi éxito académico.
