El día jueves 11 de agosto se realizó el segundo Derecho a Conversar 2016.

Natalia Roa y Héctor Soto fueron los invitados en su calidad de abogados, para abordar con los alumnos los pormenores del significado de estudiar Derecho, y la disyuntiva que esta carrera puede ser a la vez, una plataforma muy útil para desempeñarse en otras áreas laborales y profesionales.

Natalia Roa, luego de haber estudiado Derecho en la Universidad de Chile y haber ejercido como tal durante 10 años en un Estudio de abogados, tomó la decisión de desarrollar otros sueños intelectuales, de esa forma completó los estudios de Psicología y Literatura. Hoy ella se desempeña como psicóloga clínica en su consulta y realiza clases y talleres de Literatura. Héctor Soto, por su lado, quiso ser periodista, desde muy joven, pero en ese tiempo, el mejor camino para una aspiración como ésa era hacerlo a través de una carrera humanista como el Derecho, así que una vez obtenido el título de abogado en la Universidad Católica de Valparaíso,  se dedicó con pasión al periodismo y desde el periodismo a la crítica de cine, a la política y a la literatura.

Ambos invitados reconocieron que el haber pasado por una escuela de Derecho les entregó una rigurosidad profesional que no se la hubiera dado otra carrera. El Derecho les proporcionó hábitos y disciplina;  les dio un rigor en el pensamiento y una lógica que les ha permitido permear en todos  sus ámbitos de trabajo posterior.  Natalia Roa señaló que a la hora de interpretar textos o informes psicológicos, ella lo hace desde la vocación jurídica. Héctor Soto ocupó una metáfora muy reveladora al comparar el Derecho con una estantería intelectual. Sus perspectivas complementaron una visión muy motivadora de sus vocaciones. Tanto para Natalia Roa como para Héctor Soto la experiencia de haber estudiado Derecho fue muy provechosa, les formó la manera de pensar y organizar la información,; hoy día ambos la agradecen muchísimo , al punto de haberles recomendado a los alumnos que perseveren en lo que ya escogieron, que descubran la manera de asimilar mejor el aprendizaje de las leyes. “Busquen la manera personal de ser creativos, descubran su propio camino”, los instó Natalia. De una manera muy cálida, los dos invitados interpelaron a los jóvenes presentes a apasionarse, no tan solo con su carrera, sino también con la vida y sus intereses.

El público hizo algunas preguntas al final del encuentro y las respuestas  ingeniosas y con humor cerraron esta actividad.